Pues allí estaba él, vestido de negro como Raphael. Solo en el escenario, como he visto a Dominque A., con una guitarra. Su voz aguardentosa, profunda y susurrante. Tampoco es Frank Sinatra, no nos vamos a engañar. Al fondo, un piano de cola.
(al min. 1 de cabeza)
De Woody Allen tocando el clarinete, paso. Pero un concierto real de San Clint Eastwood no me lo perdería por nada del mundo. Lástima que Lee Marvin ya no esté entre nosotros para un dueto final.
PD. David Letterman repasa su filmografía
PD. En el Magazine de El Mundo, el dinosaurio habla Ha alcanzado un estado sapiencial
No entiendo muy bien por qué la gente se sorprende con la crisis. Desde el principio de los tiempos las cosas han funcionado así: una vez estás arriba y otras, abajo. No comprendo tantas lamentaciones. Crecí en una era en que las cosas tenían valor. Tenías los pocos dólares que tuvieras en el bolsillo. Ahora, con las tarjetas de crédito, uno gasta 30 veces más de lo que tiene. Todo se compra sin esfuerzo. Antes, si gastabas más de lo que tenías, pasabas a tener un problema. Tenías cuatro dólares, el cine costaba dos y medio, y la conclusión era que no podías llevar a tu chica a cenar. Simple, pero perfectamente comprensible. Estaba claro lo que tenías y lo que no. Ahora no. Las cosas han perdido valor. Quizá esté ahí el problema.
5 comentarios:
La leyenda de la ciudad sin nombre es una de mis peliculas favoritas ... fue sin embargo no muy apreciada por la crítica, según tengo entendido. "they call the wind mariah" inolvidable.
En general, casi todas las pelis de Clint Eastwood como director son peliculones.
Y como actor, sus películas eran bastante entretenidas.
Saludos
Una invitación:
uyelecciones2009.blogspot.com
La canción final de Gran Torino tiene algo sobrecogedor y único. Un instant classic. No puedo parar de canturrearla.
Yo desde luego no :D
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