¿Tiene la Fiscalía que actuar contra "Física o Química"?

Emilio Calatayud es un juez que entusiasma a conservadores y progresistas. A los segundos les gusta sus condenas "progres" guiadas por la máxima "menos castigar y más educar". No hay criminales, en plan socrático, sino ignorantes. A los conservadores se los atrae con un discurso monolítico en cuanto a los valores. En este sentido su última andanada les habrá entusiasmado: propone actuar contra Física o Química, la serie sobre adolescentes en un instituto de Antena 3.

Series como Física y Química, de Antena 3, son un auténtico atentado a los intereses de los menores. Aquí se están lanzando mensajes peligrosísimos, les están imponiendo a los menores cosas que no son. Alteran la percepción de la realidad y siembran violencia”.

Por un lado, creo que el juez Calatayud se ha quedado con lo más superficial de dicha serie. Se tratan temas peliagudos -drogas, sexo y cómo copiar en los exámenes- de una manera directa y entusiasta. Pero es que se trata de una serie de la tele en prime time y no de una hoja parroquial. Además hay una mirada contraria a la homofobia y el racismo ya que sus personajes malvados muestran precisamente ese perfil.

Física o Química es una de las series mejor concebidas, realizadas e interpretadas de la televisión española. No exhibe el nivel de adoctrinamiento de Cuéntame ni de moralina de Médico de Familia, pero tiene un malvado de categoría, un Gorka de la piel del diablo, y traza el plano de un instituto que es algo así como la antesala del infierno educativo. Todo ello sin perder una perspectiva a favor de los más débiles.

Por otro lado, el juez Calatayud no debe saber que se ha inventado un aparato llamado mando a distancia que permite saltar de Física o Química a las anteriormente citadas o su favorita, sospecho, La casa de la pradera (la última vez que la vi, en Popular TV). Ahora bien, si los padres están tan ocupados que no tienen tiempo para ver la tele con sus hijos y comentar con ellos lo que allí se ve, orientando la mirada de la manera que consideren más apropiada, es problema suyo y no de la sociedad y mucho menos mío, que ignoro por qué tengo que soportar que venga un juez censor, un fiscal intervencionista, un defensor del menor hiperbólico, un cura salvafamilias o la ministra femicuota de turno a decirme lo que tengo que ver o no a las tantas de la noche.

Y es aunque un juez de desvista de las puñetas, no pierde su carácter inquisidor y su tendencia a hacer la puñeta. Siempre, claro, por el "bien social", "la justicia social" o algo que acabe en "social".

PD. Por la regla de tres también deberían actuar los fiscales contra Rebelde sin causa, El club de la lucha o Shin chan. Desde aquí mi más sentido pésame por la muerte de Yoshito Usui, terror de los padres y héroe de la muchachada.