En el Diario Córdoba publico un breve análisis de los resultados electorales. Es la hora de los acuerdos en gobiernos multicolores. Y, al fondo, la bandera multicolor del trascendente triunfo del "matrimonio gay" en Irlanda. Los resultados han sido los menos malos posibles, ni mayorías absolutas proclives al despotismo en la derecha ni caída total en el populismo demagógico a la izquierda. Hay partido por jugar...
También multicolor, aunque esto suelo ser más habitual, el palmarés en el Festival de Cannes que no ha gustado nada a los críticos desplazados allí
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