En mi artículo en Libertad Digital sobre mayo del 68 y el cine comento dos diálogos que son muy representativos de lo que pasó en aquella época. El primero de "Los amantes habituales"
"-¿Crees que debería publicar? – ¿Qué? – ¿Sabes? Escribo poemas – ¿Por qué me lo preguntas? – No sé, me parece que publicar es como traicionar algo… – Oh. – ¿Tú a qué te quieres dedicar? – Decorador – ¿Decorador? ¿Por qué no un verdadero artista?"
El segundo de "Las invasiones bárbaras"
– "Hemos sido de todo, parece mentira: separatistas, independentistas, soberanistas, soberanistas asociacionistas… – Bueno, al principio empezamos siendo existencialistas. – Leímos a Sartre y a Camus. – Luego leímos a Frantz Fanon y nos volvimos anticolonialistas. – Entonces leímos a Marcuse y nos hicimos marxistas. – Marxistas-leninistas. – Trotskistas. – Maoístas. – Después leímos a Solzhenitsyn y cambiamos de idea. Nos hicimos estructuralistas. – Situacionistas. – Deconstructivistas. – Existe algún -ismo que no hayamos adorado? – El cretinismo."
En realidad, todos sus -ismos era variantes del cretinismo de los "verdaderos artistas". No se ha hecho ninguna película sobre el decorador, lástima
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